Invertir por mi cuenta o utilizar un asesor: Pros y Contras.

Invertir se pone cada vez más de moda. Poco a poco se presentan más espacios en los que se escucha hablar de las ventajas de “poner a trabajar tu dinero” fuera de cuentas -tradicionales- de ahorro o de algún producto financiero apegado a un  banco, para ubicarlo mejor en el mercado de renta variable. Aunque el número de “aventureros” en México es aún incipiente (si se le compara con otros países), es un hecho que la tendencia va en aumento. 

Al respecto, por ejemplo, la Comisión Bancaria y de Valores (CNBV) dio a conocer que -hasta marzo de este año- existían cerca de 1.3 millones de cuentas de inversión en el mercado de capitales. 

Éste, por supuesto, no es un número destacado si se le contrasta, por ejemplo, con el de la Población Económicamente Activa (PEA) que, según el Instituto de Geografía y Estadística (INEGI), para el segundo trimestre de este año, era de 57.7 millones de personas; lo que significaría que, apenas, sólo 0.2% de este grupo demográfico destina capital en este rubro. 

Sin embargo, el que este número no crezca de manera más rápida, se debe -mayormente- a que persiste aún desconocimiento y desinformación sobre las ventajas de invertir; y, también, porque tampoco se ha popularizado la oportunidad de hacerlo a través de un asesor profesional. 


Entonces, ¿qué decisión tomar? 

Desde Polígono Capital hemos hablado ya, por ejemplo, de las primeras consideraciones que un inversionista debe de tomar en cuenta a la hora de poner a trabajar su dinero. Como promotores del Venture Capital también priorizamos y vemos con buenos ojos el “riesgo” y comentamos el tipo de acciones en los que se puede poner a trabajar dinero al iniciar este camino e, incluso, señalamos algunos puntos a considerar al iniciarte en este camino. 


Invertir por cuenta propia: Los pros 

La valentía es una cualidad innata de quien coloca capital en el mercado de valores. Quien arriesga su dinero ahí, sin importar si es un perfil conservador o alto, tiene claro que su crecimiento dependerá de dos cosas: Las buenas decisiones soportadas en análisis y la paciencia para “aguantar” las caídas o embates que puedan  presentarse.

Para los inversores menos arriesgados, que apuestan por una rentabilidad baja pero segura, el trabajo del asesor no resulta necesario, más allá del personal de institución financiera que se encargue de poner en marcha, por ejemplo, un fondo de renta fija.  Además, es importante destacar que, si se cuenta con nociones o un conocimiento previo en temas bursátiles, el mejor camino para comenzar a inyectar capital está en las apps especializadas.     


Invertir por cuenta propia: Los contras 

Para incrementar un capital se deben valorar y plantear opciones que lo pongan a trabajar en serio. Hemos comentado, en este caso, que la diversificación es una gran oportunidad que permite colocar activos -al mismo tiempo-en perfiles conservadores y en otros que implican más riesgo. Y eso se logra, normalmente, a través de una lectura profesional y con experiencia. 

Si se quiere arriesgar más y se cuenta con una cantidad importante de dinero  para invertir, un asesor o broker es el mejor aliado para generar rendimientos, ya que no sólo sabrá cómo gestionarlo mejor, sino que conocerá las tendencias del mercado y las mejores oportunidades.

En un sentido práctico un consejo a tiempo puede hacer la diferencia para ganar mucho y perder poco, por ello, pagar una comisión por este tipo de servicio podría permitir seguir sacando provecho al capital invertido.

Francisco González

Líder Ejecutivo en Inversiones